3 ago 2010

Las primeras papillas y comidas del bebé


La alimentación del bebé es parte fundamental de su desarrollo y crecimiento, de está forma partiremos del hecho, que para seguir un ritmo normal en este tema, deberías tomar como principal concejo, lo que determine tú pediatra para cada momento, a medida que pasen las semanas.

Es a partir de el quinto o sexto mes, cuando empiezas a incluir alimentos a su nutrición, hasta ese momento la leche tanto materna como artificial es suficiente para su crecimiento, pero hay que plantearse el que ya necesita más aportes nutricionales, y el descartar posibles alimentos que produzcan reacción en ellos; por eso como principal observación es ir poco a poco, con pequeñas cantidades, y con una verdura a la vez, y luego ir mezclando.

Las carnes, también deben ir de forma pausada, y en pocas cantidades porque son muy pesadas; todo debe ir muy bien triturado, porque seguro las sensación nueva, le provoque el vómito, y si no es de fácil el paso, por algún trocito, seguro será molesto y más estimulante para devolver.

El pediatra, seguro te dirá por cuales debes empezar; lo común son las papillas de verduras, como zanahoria, calabacin, patatas, calabaza, luego una mezcla de todas; más a delante la integración de carnes, se suele empezar por el pollo, con una cantidad pequeña de unos 50gr es suficiente, la sal, no es aconsejable hasta después del año, la grasa si hace falta, algo puede aportar la carne, pero unas gotitas de aceite de oliva estaría muy bien. La cantidad es pequeña, por lo general, al principio con la medida del biberón, puedes servir unos 120 cl, pero no lo debes forzar, habrá un momento en el que él mismo no quiera y debes parar, puedes completar con un biberón de leche recuerda que se está adaptando, y tal vez sea un poco desagradable.

También debes tener en cuenta las papillas de frutas, los bebés necesitan un aporte de fibra, azúcar y vitamina, las frutas le proporciona todo lo necesario, debes empezar por las más asequibles, manzanas, peras, bananas, papaya, melón; desde luego igual que lo explicado anteriormente, con las verduras, mezclar paso a paso y en pocas cantidades, con la consistencia de papilla seguro será mucho más, difícil de digerir, pero contienen todo el producto, el zumo es otra opción, pero el agregar agua, ya para un poco o dispersa los nutrientes. No agregues azúcar, no es necesario, ya la fruta contiene la suficiente para el bebé.

Trata de llevar un orden de horarios, para que se adapte a comer a sus horas y la digestión sea sana, comen cada cuatro horas; en la mañana su biberón de leche, el cual puede llevar integrado algún cereal, con 250 cl, es suficiente. a media mañana, la merienda, un poco de fruta en papilla, muy bien, siempre que sea natural está bien, pero de seguro los potitos del mercado, también cumplen con los aportes nutricionales para su crecimiento, y si estás de paseo, es un buen aliado.
A la hora de la comida, dos o tres horas después de la merienda, depende de la cantidad que allá comido en la merienda, debes dar su papilla de verdura y/o carne. Puedes completar los primeros días con un biberón de leche, recuerda que no se lo va a comer todo, y no lo debes forzar.

Seguro hará una siesta, al despertar, otra vez fruta, no estaría mal, puede ser la media que dejo de la mañana, o un potito hasta donde a él le apetezca. Y para la noche, antes de dormir, su biberón de leche, igual que en la mañana, estos a portes hasta los doce meses, serán suficiente, y claro, una vez le empiecen a salir los dientes, puedes incluir alimentos más sólidos, como galletas, pastas, arroces.

No te desesperes por querer, darle mucho y pensar que estando, más gordito, estará sano, una dieta completa y balanceada en el objetivo.


21 jul 2010

2 jun 2010

La importancia de elegir un buen calzado para tu bebé




Un buen calzado desde temprana edad es de vital importancia para el correcto desarrollo de tu pequeño. En el momento en que comienza a andar (a partir del año, normalmente) los zapatos se convierten en su mejor aliado y deben cumplir una serie de requisitos para facilitar su aprendizaje locomotor así como para no impedir el correcto crecimiento de los pies del bebé.

He aquí una breve guía con consejos para que elijas conscientemente un buen calzado para los más pequeños.
1. Elige calzado plano; nada de tacones para niñas por muy coqueta sea tu hija.

2. El interior debe ser cómodo; asegúrate introduciendo la mano. Nada de contrafuertes en el interior, pero tampoco debe estar almohadillada la planta (por mucho que l@ quieras cuidar “entre algodones”…no es bueno que pise en blando!

3. El talón del zapato debe ser rígido ya que los talones de los pequeños son bastante blandos; sus pies no estarán formados hasta que cumpla tres años.

4. El calzado debe ser flexible y cómodo. Cuando lo compres dobla el zapato y cuando se lo pruebes pregúntale si le hace daño y observa su cara. Hazle andar un poco y si no se queja todo va bien (aunque después podría hacerle daño).

5. Elige bien la talla. No debe quedarle justo o le molestará, pero tampoco debe ser ni una ni varias tallas mayor (por aquello de que le durará más tiempo). Debe ser su talla; compruébalo presionando sobre la puntera para saber donde están sus deditos.

6. Elige marcas de calzado con prestigio y reconocimiento; no te la juegues con el calzado de tu peque o podrá sufrir consecuencias físicas negativas en un futuro.
He aquí una breve lista con marcas de calzado que seguramente conoces y que muchos padres han elegidos como las mejores para cuidar los pies de sus pequeños:

Ya lo tienes claro? Cuál es el calzado que tu le has comprado o has decidido comprale a tu pequeño? No es nada fácil…supongo que por muchos consejos e informaciones que leas al final tu instinto y tu percepción cuando vayas a comprarlos también influirá en tu decisión…


24 abr 2010

Quiero ser mamá...Pero de una nena

La dieta para tener una niña

Una determinada dieta puede influir en el metabolismo de la mujer y ayudar a concebir una niña, según afirma el método Baretta. Descubre qué alimentos debes tomar para tener una niña.


La científica argentina Alejanda Baretta defiende que consumir determinados alimentos antes del embarazo en abundancia y reducir otros puede ayudar a las mamás a concebir una niña.




Estos cambios en la alimentación deben hacerse un tiempo antes de la fecundación, para modificar el metabilismo de la mujer y hacerlo más receptivo a los espermatozoides X.

Cualquier modificación de la dieta de este tipo debe realizarse bajo la supervisión de un médico.

Leche o yogur natural. Cuatro porciones (una porción equivale a 125 ml o a media taza).

Cereales. Tres porciones (una porción equivale a una rebanada de pan de 30 gramos o bien a 125 gramos de sémola, arroz o pasta). Pan, pasta y arroz debe ser sin sal.

Verduras o legumbres. Dos porciones a elegir entre espárragos cocidos (1/4 de taza), achicoria (media taza), lechuga (media taza), guisantes frescos a voluntad. Están prohibidas las legumbres en conserva o congeladas, menestras precocinadas y patatas.

Fruta. Tres porciones a elegir entre piña en lata (dos rodajas), cerezas (media taza), frambuesas y fresas congeladas o en almíbar (media taza), naranjas y mandarinas (a voluntad), pomelo.

Pescado o carne. Una porción (que equivale a 30 gramos) a elegir entre buey, cordero, ternera, cerdo, conejo y pescado.

• ALIMENTOS PROHIBIDOS: sal, cebolla, apio, cubitos de caldo, miel, soja, cacao, azúcar no refinado, biscotes, embutidos variados, salchichas, carne en conserva, sardinas en lata, almejas, cangrejos.



27 mar 2010

El proceso de la dentición

La dentición puede comenzar a partir de los 3 meses y continuar hasta que el niño(a) cumpla los tres años.

Cuando su hijo tenga entre 4 y 7 meses de edad, usted podrá notar que sus primeros dientes ya dan signos de querer abrirse paso a través de las encías. Los primeros dientes en aparecer generalmente son los dos dientes frontales inferiores, también conocidos como los incisivos frontales inferiores.

Después de 4 u 8 semanas, les suceden los cuatro dientes frontales superiores (incisivos frontales y laterales superiores). Aproximadamente un mes después, aparecerán los incisivos laterales inferiores (los dientes a los costados de los dientes frontales inferiores).

Los dientes que salen a continuación son los primeros molares (las muelas al final de la boca que utilizamos para masticar la comida), y luego finalmente los colmillos (los dientes puntiagudos en la mandíbula superior). La mayoría de los niños tienen sus 20 dientes de leche (los primeros dientes que aparecen) al cumplir su tercer año. (Si su hijo tiene un retraso significativo, consúltelo con su pediatra.)







En algunos casos poco frecuentes, los niños nacen con uno o dos dientes o producen un diente durante las primeras semanas de vida. Salvo que estos dientes interfieran con la alimentación o estén demasiado sueltos como para que el bebé pueda tragarlos, generalmente no es una causa de preocupación.

Cuando a los niños les comienzan a salir los primeros dientes, probablemente babearán más y empezarán a querer morder las cosas. Mientras que en algunos niños la salida de los dientes no es un proceso doloroso, otros pueden experimentar breves períodos de irritabilidad, y algunos se mostrarán irritados durante varias semanas, con episodios de llanto y patrones de sueño y de alimentación irregulares. La dentición puede ser incómoda, pero si su bebé se muestra muy irritable, consúltelo con su pediatra.


Aunque las encías sensibles e hinchadas pueden provocar un pequeño aumento de la temperatura del bebé, normalmente la salida de los dientes no ocasiona fiebre alta ni diarrea. Si su bebé tiene fiebre durante la dentición, puede que se deba a otro motivo y es mejor que se ponga en contacto con su pediatra.

10 feb 2010

A la guardería!!!!!!

Tu hijo va a empezar la guardería y conviene que tomes algunas iniciativas para superar con éxito las primeras separaciones entre ustedes.

Explicando la nueva situación


Todos tenemos que adaptarnos a esta nueva situación e intentaremos hacerlo de la mejor manera. Vamos a comenzar dando explicaciones al niño en los días anteriores al ingreso en la escuela o guardería de las cosas que se hacen allí, de las personas que habrá y de qué es lo que hará él.

Podemos echar mano de primos o amiguitos que ya hayan comenzado en el año anterior y que le puedan reforzar el hecho de ir al cole, lo que hacen allí, si se divierten... Esto servirá para niños mayores que pueden comunicarse ya.

Durante las vacaciones


A lo largo del verano en nuestro lugar de vacaciones enseñaremos al niño los colegios de la zona, se lo haremos ver cuando pasemos cerca de alguno, enseñándole las clases, los dibujos, las amacas del patio. Debe ser un trabajo de concienciación, el niño debe de ver el colegio como algo normal y natural así cuando llegue el primer día no será algo extraño para él.

Los padres, como siempre, juegan un papel muy importante. Deben transmitir al niño que lo que hace es lo mejor, por eso hablarán del colegio a diario durante el verano, comprarán todos los accesorios necesarios con la colaboración del niño... todo debe verse como algo positivo, dejadle que elija su cuaderno con su héroe favorito y sus lápices, con su cartera nueva irá el primer día a la escuela tan contento.

Según la edad que tenga el bebé, tendrás que actuar de forma sensiblemente diferente para prepararle para ese momento. Por ahora, supone uno de los más importantes cambios que va a sufrir en lo que lleva de vida. Por ello es importante tener en cuenta algunos aspectos fundamentales.